Carta de las injusticias nº1

Era diciembre de 2004 y el pequeño Jimmy se sentó a escribir en su escritorio una carta que jamás llegaría a su destino, una carta cargada de sentimientos para alguien que en su corazón ocupaba un puesto notable:

¿Sabes? Aun recuerdo cuando te vi por primera vez en los pasillos de la escuela, eras alguien que siempre estaba sonriendo, realmente no sé cuando empezamos a hablar, solo sé que era bastante normal, hola y adiós, en eso prácticamente se basaban nuestras conversaciones y quizás había un abrazo de por medio o dos besos típicos de saludo, pero desafortunadamente nada mas, aunque por dentro deseaba que pudiéramos hablar como dos grandes colegas.

Tardo su tiempo pero al final empezamos a hablar un poco más, y la confianza fue entrando poco a poco, y desgraciadamente era una época mala para los dos, yo intentaba llamar tu atención con bromas que para mi eran inocentes, como un niño pequeño que siempre quiso atraer la atención de su padre o su madre. Pero lo único que conseguí fue ofenderte hasta que no pudiste más y explotaste, fue  entonces cuando me di cuenta que las cosas que decía te estaban hiriendo lo que resulto mortal para mí.




Es curioso pero a pesar de que siempre intento estar alegre, hay momentos en los que no puedo, yo creo que normalmente la rabia o la tristeza se juntan para que no piense bien las cosas. Desgraciadamente yo también soy un niño pequeño que cuando le dicen que algo estuvo no estuvo bien, se siente fatal, porque los remordimientos invaden mi pequeña cabeza. Solamente quiero estar a tu lado para que puedas ver mi cara de arrepentimiento, para poder explicarte mis intenciones, pero desgraciadamente se que no será así.

Me muerdo los labios para no llorar y que mi madre no pregunte que es lo que me ocurre, algo a mi oído me dice que vaya y te diga que es lo que no me gusta de ti, pero en el fondo se que no puedo hacerlo, mi mayor héroe me diría que cuando quieres a alguien no intentas cambiarlo,  soportas sus errores y si alguna vez es necesario decir algo, que sea con amor para no herir a la otra persona, así que mis labios se quedaran sellados, porque para mí es mucho más importante verte sonreír.

Desde lo más profundo de mi corazón te mando un gran abrazo, te deseo lo mejor sea donde sea que estés y me sigue alegrando que le puedas poner al mal tiempo buena cara, espero que pronto podamos ponerle los dos esa cara a las tormentas, y mejor aun bailar bajo la lluvia. Cuídate mucho y espero que te vaya bien,.

                                                                         Te quiere tu pequeño amigo
                                                                                                                               -Jimmy

Notas del autor: La historia escrita aquí no es real, sin embargo los sentimientos  lo son, esta es la primera de una serie de cartas que escribiré basándome en sentimientos propios y ajenos. –Cualquier coincidencia con la realidad es pura ficción, lo único de verdad aquí es lo que transmiten los personajes-            

                                                                                                                    
*El navegante*

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